PORQUÉ MARAKOA

MARAKOA: Tú serás el centro del Universo.

 

     Así cantó el poeta y es una de las causas por la cual escogimos este nombre para nuestra publicación.

 

     La emblemática antigua capital San Fernando de Atabapo (MARAKOA) del entonces Cantón de Río Negro, después Provincia de Amazonas, luego Territorio Federal Amazonas y actual estado Amazonas, es hoy nuestra capital sentimental.

 

   Este periódico digital nace como producto de una necesidad inaplazable de darle salida a la OPINIÓN AMAZONENSE, como su lema lo dice, la cual está secuestrada al no haber medios impresos donde escribir nuestros pareceres e inquietudes, que muchos llevamos por dentro y que no vemos otras salida que MARAKOA.

 

     En la actualidad, cuando nuestro País está viviendo épocas muy difíciles, Amazonas las está viviendo doblemente difícil, como siempre ha sido a través de nuestra Historia, cuando siempre hemos sido una región marginada, execrada e ignorada por el resto de Venezuela. Y también como siempre, el pariente indígena es quien más sufre esta situación de injusticia e iniquidad en sus propias tierras ancestrales. Le ha sido negada a través de trabas de todo tipo, de manera sistemática, la demarcación de sus tierras, Ley que tiene rango Constitucional; para llevar 1 litro de gasolina hasta sus alejadas comunidades necesita la firma de un general; han sido desarmados totalmente y al que le encuentren 1 cartucho para la cacería de la cual han vivido milenariamente va preso, con la acusación de guerrillero colombiano, cuando estos se pasean orondamente en nuestro patio con la anuencia de ellos: Y paramos de contar, porque la lista de iniquidades es todo un prontuario que algún día se abrirá.

 

     Somos una región tomada por los militares que disfrutan a sus anchas de un pueblo inerme, al aplicar siempre las leyes de forma sesgada, según su conveniencia; por los guerrilleros (hay más de 4.000, según el Gobernador) a los cuales ahora los militares llaman comandante (ver las denuncias de Monseñor Divasson el último 5 de julio) y tienen un fuero en nuestro Amazonas del cual carecemos nosotros en nuestra propia tierra: están en las comunidades indígenas y por todo Amazonas, explotando el oro, ejerciendo el rol de autoridad y control y cuando son denunciados ante los militares siempre dicen en forma cómplice y societaria: “Tráiganme las pruebas”. Es más, si el denunciante está solo, toman retaliaciones, como a un guía turístico, al cual le quitaron la licencia. Los guerrilleros siempre afirman en las comunidades indígenas: “nos iremos de aquí cuando este gobierno deje de mandar”. Ante tal cuadro de desolación uno no puede dejar de pensar si tal situación es o no es una política de estado. Al parecer si y también están proclives a gobernarnos con la delincuencia. Todos estos flagelos están acabando con Venezuela. José Eustacio Rivera dice en su Novela “La Vorágine”, refiriéndose al Territorio Federal Amazonas de la era de violenta y genocida del caucho: “Funes hay muchos, aunque uno solo lleve el nombre”. Esa situación en Amazonas no ha pasado y está más actualizada que nunca. Los Funes solamente cambiaron de forma y de uniforme. Pero algún día no lejano aparecerá un Arévalo Cedeño y quedarán ante la Historia a la misma altura que su émulo.

 

     Por lo demás las páginas de MARAKOA están abiertas a todos los que quieran escribir y opinar sobre cualquier tema. Son bienvenidos.